LA MAYORDOMÍA EN LA ÉPOCA ACTUAL

Mayordomo es el jefe de familia que se ofrece voluntariamente para atender los gastos para sacar la fiesta patronal. La mayordomía se puede integrar por dos personas, y se nombran primero y segundo mayordomos, con la finalidad de apoyarse en la organización, cuando no hay mayordomo mayoritario, la asamblea forma un comité organizador y se conforma por un grupo de personas que libremente se ofrecen para asumir los gastos y el cuidado y el gobierno de la fiesta patronal. En la agencia El Castillo, el 12 de febrero de cada año se celebra la fiesta de la Patrona, así nombran a la virgen de Guadalupe. Esta celebración se inició en el año de 1903, dato que aparece en el libro del archivo de la comunidad. Cinco días antes de la fiesta patronal, los mayordomos y vecinos voluntarios se reúnen en la cofradía llevando dones como maíz, frijol, gallinas, un puerco u otros. Se hace un tequio para asear los espacios donde se celebrará la fiesta que inicia con un novenario de misas.

Hasta los años sesenta, para honrar a la Patrona del Rancho, acudían a tocar en la fiesta de mayordomía la banda de música de Zapotitlán Palmas, ahora es un municipio que pertenece a Puebla, en esa época perteneció a Huajolotitlán y venían caminando por los montes trayendo sus instrumentos de música de viento para llegar a las 5 de la mañana a tocar las mañanitas a la Virgen. Los mayordomos y la comunidad los recibían con cohetes, campanadas, un buen almuerzo y aguardiente. Cuando llegaba la fiesta de mayordomía en Zapotitlán, la gente de Castillo llevaba flores y cohetes a eso le llamaban “La Correspondencia”.

Tiempo atrás se acostumbraba en la fiesta de la mayordomía, el juego de Los Moros. Los moros eran hombres vestidos con ropa de colores y decorada con espejos pequeños, danzaban con machetes simulando la lucha histórica de cristianos contra musulmanes.

La maroma, eran juegos de acrobacia y recitaban versos chistosos con los que hacían reír a su público. Tanto la maroma como el juego de los moros, los actores eran la gente de la comunidad.

En el último cuarto del siglo pasado, la mayordomía empezó a celebrarse con un costo más elevado. Durante el año la familia del mayordomo se esmera para reunir dólares o pesos para “sacar la fiesta”. Engordan animales, contratan con anticipación la banda de música, cortan los árboles viejos con un año de anticipación para que se sequen y sirvan para cocinar, hacen acuerdos con el contratista de toros, gallos o caballos dependiendo de los eventos que planeen.

Meses antes de “sacar la fiesta”, la esposa del mayordomo recorre en comitiva familiar las casas de las familias de la comunidad, para invitar a la gente a despedazar el chile, hacer tortillas, limpiar los ingredientes para el mole. Los hombres son invitados a “echar la leña”, que es cortar en pequeños trozos los troncos de los árboles ya secos para ponerla al fuego.

Toda la comunidad se reúne una semana antes  en la cofradía, que es el espacio donde se preparan los alimentos. Se hace “La tostada del chile” –como la nombra la comunidad. Esta reunión de trabajo, que le llaman tequio general,  se convierte en una romería, se da en medio de albureo, risas y esfuerzo compartido.

Durante el año,  en esta agencia celebran La Navidad, el 12 de febrero, el 4 de julio a la virgen del Refugio y el 8 de diciembre a la Inmaculada Concepción. Estas fiestas se organizan en mayordomía.

La Navidad se celebra en comunidad y predominan los ritos religiosos. En esta fecha vienen los paisanos de Estados Unidos, de la ciudad de México y otras ciudades del país. En los inicios de la celebración de la fiesta navideña en esta comunidad,  el 24 en la noche casi todas las familias se reunían en la capilla  en un ambiente de piedad, cantos, cena y dulces. En la actualidad se celebra en la casa del mayordomo, en medio de rezos, cantos de arrullo, cena comunitaria y piñatas. La Cena de Navidad en familia, los regalos al pie del árbol, costumbres de una cultura urbana son ajenos a las tradiciones de este lugar.

Los miembros de esta comunidad a pesar de sus dificultades, mantienen entretejidas sus relaciones, sus deberes, sus acuerdos, sus compromisos, sus ideales, sus necesidades vitales y su economía.